Occidente: Aprender en casa ajena: Cristianos en tierras del Islam

Título: Cristianos en tierras del Islam

Autor: Claude Lorieux

Ediciones Palabra, Madrid 2002

Este libro narra la situación de la minoría cristiana en Oriente, en concreto en Irak, Turquía, Siria, Líbano, Palestina, Jordania, países de la Península Arábiga, Iran, Egipto y Sudán. Si bien algunos datos hay que actualizarlos en el mapa compulso de la historia de Oriente medio, sí que el libro tiene una gran actualidad en Occidente donde nos planteamos alegremente "la alianza de civilizaciones".

Recientemente (enero/2006) hubo un Congreso en Túnez sobre el tema al que no asistió nadie del ejecutivo de Zapatero en el que los mismos musulmanes plantean el problema del radicalismo islámico que hace imposible esa alianza de civilizaciones. En frase de la Ministra de cultura argelina Jalida Tumi: «¿De qué diálogo hablan», «mientras exista el terrorismo islámico, hablar de diálogo es impensable». Tumi destacó en su intervención que este movimiento violento «nació dentro de nuestra sociedad impulsado por las corrientes más fanáticas del Islam», pero que al mismo tiempo «encontró cobijo en algunas capitales europeas en nombre de la sacrosanta democracia y libertad».

Tenemos servido un problema que impide la convivencia pacífica, que somete a los cristianos en el Oriente a vejaciones y crímenes sin que en Occidente muevan una ceja, pero que tampoco es deseable a las personas moderadas del Islam.

El test de la libertad está en la posibilidad de practicar la religión propia sin presiones, en poderse convertir a otra religión e, incluso, poder vivir sin ninguna religión.

Para que haya alianza de civilizaciones es preciso que se respete la libertad religiosa en países como por ejemplo Turquía (candidato para entrar en la UE), que se permita la costrucción de Iglesias, se permita la educación cristiana, no esté penado con la muerta la conversión a otra religión, que no haya ciudadanos de segunda.

El libro no da esas claves, sólamente muestra unas realidades dolorosas y tremendamente ciertas como para obviarlas en el diálogo para el entendimiento de Occidente con Oriente.