En el libro "El rumor inmortal", Spaemann muestra la actualidad de preguntarse sobre Dios, su existencia y su incidencia en la vida de los hombres. Igual que existe un rumor cósmico sobre el inicio del mundo que conocemos, hay otro que clama por un autor, por un Ser que sustente el mundo conocido.La cuestión de Dios puede cerrarse en falso y es vital para el hombre, criatura, que tarde o temprano tendrá que enfrentarse con su tránsito a la otra vida. Resolver con la "nada" hace vacía la existencia. Y al menos, esa "nada dramática" no es una cuestión que deje indiferente al hombre o que no implique un enfoque diferente ante la vida.
El origen del mundo, el origen y fin de la vida humana, la existencia del espíritu, son temas clásicos, tratados desde siempre y que hacen del hombre un ser esencialmente religioso.
Si Dios existe, requiere una respuesta del hombre: el culto debido. Si Dios habla al hombre, requiere otra respuesta: la aceptación de su mensaje.
Si el hombre está capacitado para captar verdades científicas, ¿no lo está también para las metafísicas? Y el orden de la sociedad humana ¿sería el mismo si se organizase como si Dios no existiese?
Un edificio construido sin respetar cálculos y leyes físicas está abocado al desastre. Una sociedad construida sin respetar la naturaleza humana y su relación con el Creador está abocada a ser hostil con el propio hombre.
La tiranía del relativismo es un ejemplo de cómo eliminando la "posibilidad de conocer la verdad" lo que parece dejarnos libres de pensar cualquier cosa, nos deja desmontados, sin argumentos, ante la imposición de la mayoría, de los gobernantes, de los más fuertes.
Recomiendo dejarse llevar por el rumor inmortal sobre Dios, dejarse cautivar con la humildad del niño ante su Padre Dios, de la criatura amada ante su creador y construir así una sociedad en armonía con el ser real del hombre.
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Título: El rumor inmortal. La cuestión sobre Dios y la ilusión de la Modernidad
Autor: Robert Speamann
Edita: Rialp, Madrid 2010
